La doctrina del shock es la historia no oficial del libre mercado.
Desde Chile hasta Rusia, desde Sudáfrica hasta Canadá, la implantación
del libre mercado responde a un programa de ingeniería social y
económica que Naomi Klein
identifica como «capitalismo del desastre». En esta ocasión, argumenta
el cómo, los gobiernos socavan las libertades y los derechos
aprovechando los momentos en que la sociedad está más impactada por
guerras, catástrofes o atentados. Para su argumentación, se apoya sobre
la base de una teoría del economista neoliberal estadounidense Milton Friedman, “solamente una crisis real o percibida produce cambios verdaderos”.
En
los años 50, en pleno auge de la psiquiatría, y ante los nuevos avances
utilizados en la curación de enfermedades mentales, como el
electroshock, utilizado para limpiar las mentes de los enfermos
mentales, la CIA financió una serie de experimentos mediante los cuales
se elaboró un manual sobre como doblegar la moral de los prisioneros. La
clave consistía en emplear el shock para reducir a los adultos a un
estado infantil, en el cual el individuo es más propenso a la sugestión y
a obedecer, que en un estado normal.
Posteriormente, Milton
Friedman también encontró otra aplicación del estado de shock. Y es que
estos procedimientos no funcionan solo con individuos, sino también con
sociedades enteras. Friedman recomendó a los gobiernos que aprovechasen
los desastres naturales, guerras, golpes de estado, atentados
terroristas, crisis económicas, etc., para imponer medidas de libre
mercado impopulares, medidas como las que estamos sufriendo ahora mismo,
privatizaciones, abandono de protecciones sociales, despidos masivos,
etc.
Frente a esto, la periodista canadiense plantea como defensa, que la ciudadanía este informada sobre lo que ocurre y por qué.
Película
sobre los orígenes de las teorías radicales de Milton Friedman,
profesor de la universidad de Chicago, y su puesta en práctica, durante
los años cuarenta, en países tan dispares como el Chile de Pinochet, la
Rusia de Yeltsin, la Gran Bretaña de Thatcher y, más recientemente, en
Afghanistan e Irak. The Shock Doctrine pone al descubierto el lado más
oscuro de la ideología de Friedman, tan impopular que sólo pudo
imponerse mediante la tortura y la represión. Continuación natural de su
gran éxito "No logo". (FILMAFFINITY)