15 personas de distintas nacionalidades. Un solar abandonado. Resultado: un lugar de encuentro vecinal, abierto durante tres días. El Ayuntamiento cierra el espacio.
Un solar abandonado y cerrado durante más de 30 años en Madrid. 15 personas de distintas nacionalidades, procedentes de áreas como la arquitectura, el arte, el diseño, la biología o el medio ambiente y con una común inquietud por la reutilización de espacios públicos en desuso se reúnen en un taller de intervenciones urbanas organizado por La Casa Encendida. El solar será transformado.
De la mano del colectivo Urbanaccion, especialistas en estas intervenciones y dirigidos, en la práctica, por un resolutivo grupo de acción urbana, Esterni, procedente de Italia, la Junta Municipal de Distrito les ofrece la posibilidad de intervenir en un solar urbano abandonado, situado en la calle Doctor Fourquet nº 24, del barrio de Lavapiés, en Madrid.
El primer paso, mediante entrevistas a pie de calle, fue conocer las preferencias y necesidades de los vecinos del barrio. Las demandas más populares: un lugar de encuentro vecinal donde hacer deporte, jugar, organizar eventos culturales, estar en contacto con la naturaleza, intercambiar tiempo y objetos, ver arte y, por supuesto, conocer a otras personas.
El resultado: un huerto, una zona de deporte (campo de fútbol, petanca y bádminton), un mercado (trueque y banco de tiempo) y un teatro al aire libre. Y, como en todo parque que se precie, senderos, zonas verdes y de descanso. Todo ello fabricado artesanalmente, con estructuras temporales y desmontables, tratando de utilizar el material encontrado en el solar, reciclando de la calle y gestionando donaciones altruistas, además de contar con el trabajo desinteresado de muchos vecinos.
El pasado 5 de diciembre se organizó una fiesta de apertura de 'Esta es una plaza' donde hubo diversión para todos. Los niños por fin pudieron jugar al aire libre, se organizaron partidos simultáneos en los que se mezclaron las edades, hubo participación espontánea en la plantación del huerto, degustación de alimentos caseros, actuaciones musicales y de teatro, proyección de dibujos hechos en directo sobre los muros, música silenciosa y mucha comunicación entre los asistentes.
Sin embargo, el Ayuntamiento volvió a cerrar el espacio de forma que se está solicitando la cesión temporal del espacio al Ayuntamiento, para llevar a cabo los diversos proyectos planteados por asociaciones y vecinos, con el fin de disponer de un espacio público autogestionado.