El pasado miércoles 9 de septiembre, el Parlamento Europeo aprobó un documento denominado “Emancipación de las niñas mediante la educación en la UE“, presentado por la eurodiputada socialista Liliana Rodrigues, de Portugal.
El informe, que ha pasado a conocerse como Informe Rodrigues, aborda la necesidad de tomar medidas en torno a la igualdad de género en la educación.
Fuente: Universia
El proyecto, votado el 9 de septiembre en el Parlamento Europeo, fue aprobado tras recibir 408 votos a favor (65% del electorado), frente a 236 en contra (35%) y 40 abstenciones (6%).
¿Qué establece el informe Rodrigues?
El informe parte de ciertas cifras y nociones básicas, como el hecho de que la educación es fundamental para “garantizar la igualdad de género y la capacitación de las niñas”; que “los estereotipos de género asignan roles diferentes, definidos y limitados a los hombres y las mujeres” y que estos roles son interiorizados durante la infancia; y que el 17 % de los adultos en todo el mundo no saben leer ni escribir, dos tercios de los cuales son mujeres.
A partir de estas y otras consideraciones, el informe realiza 57 recomendaciones, en las que se recoge la necesidad de:
- alcanzar la igualdad de género en todas las áreas de formación,
- una mayor sensibilización en la formación de docentes y todo personal asociado al crecimiento de los niños,
- corregir el desajuste entre la educación de la mujer y su rol en el mercado laboral a través de la superación de la segregación horizontal y vertical
- promover la representación paritaria en la gestión de organizaciones y dirección de instituciones educativas
- invertir en campañas informativas, de sensibilización y educativas y a que mejoren la orientación profesional destinada a las niñas y los niños,
- animar a las niñas a optar por carreras que han sido tradicionalmente masculinas y estimular su confianza personal, y viceversa • poner en marcha programas en los que se trabaje activamente con los padres de los niños
- mejorar la calidad de la educación y la formación profesional para las personas con discapacidad o con necesidades educativas especiales
- apoyar activamente la enseñanza de la lengua del país de acogida a las mujeres migrantes
- contribuir a desarrollar un enfoque intercultural de la enseñanza para favorecer la apertura, el respeto mutuo y el diálogo intercultural e interreligioso
- instaurar una educación en materia de sexualidad para prevenir embarazos no deseados, la disminución de la mortalidad materna e infantil, la prevención y el tratamiento precoz de las enfermedades de transmisión sexual y la reducción de las desigualdades sanitarias
- luchar contra la discriminación por motivos de orientación sexual e identidad de género en los entornos educativos y apoyar la inclusión de información objetiva sobre cuestiones LGBTIen los currículos escolares
- adoptar medidas destinadas para lograr una mayor promoción de las mujeres en la cultura y la producción artística e intelectual y su difusión
- desarrollar desde la educación preescolar la igualdad de las niñas y los niños en el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación
- impulsar medidas educativas destinadas al reconocimiento y la enseñanza del papel de las mujeres en la historia, la ciencia, la política, la literatura, las artes, la educación, etc.;
- avanzar en el reconocimiento mutuo de los títulos, certificados y otros documentos acreditativos de cualificaciones profesionales emitidos en los diferentes Estados miembros, para que las mujeres emigrantes, tanto las comunitarias como las procedentes de terceros países, puedan acceder a puestos de trabajo acordes con su formación y cualificaciones
Un informe controvertido
Son varias las voces a nivel comunitario que se han alzado tras la aprobación del informe en la Comisión de la Mujer de la Unión Europea el pasado mes de junio.
Dos de los más fervientes opositores han sido Europe for Family y Profesionales por la ética, quienes consideran que no sólo el informe no tiene una base jurídica legal, sino que además contradice tratados internacionales y europeos, como el Principio Fundamental de Subsidiariedad de la Unión Europea, la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Convención Europea de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
La presidenta de Profesionales por la Ética, Leonor Tamayo, sostiene en el sitio de la organización, que “el contenido del Informe Rodrigues atenta contra las libertades de pensamiento y expresión y se introduce en la vida privada de las personas vulnerando además el derecho de los padres a ser los primeros y principales educadores de sus hijos”.
Indica además que “con el Informe Rodrigues y sus recomendaciones, los valores de muchas familias y modelos educativos como la educación diferenciada, no tienen cabida en el sistema educativo”. No obstante, el informe ha sido aprobado, y sienta las bases para promover principios en la educación de la UE. Habrá que ver ahora cómo cada Estado implementa las medidas propuestas y aprobadas por el Parlamento Europeo.