Que una nueva escuela es necesaria creo que es una afirmación con la que casi todo el mundo estará de acuerdo. Cómo debe ser esa escuela quizá genere más discrepancias. Sin embargo, los principales expertos señalan que para cambiar el modelo educativo adaptándolo a las necesidades actuales es necesario introducir metodologias activas, fomentar el trabajo en equipo, integrar la tecnología, realizar una evaluación formativa y hacer una lectura del currículum más competencial. Palabras. ¿Qué significa todo esto? Para un profano en la materia es un blablabla sin sentido que parece importante pero que no se sabe bien en qué se traduce. Es muy posible que en un intento de introducir estos cambios se acaben produciendo operaciones de maquillaje que únicamente se basan en palabras y buenas intenciones y acaben justificando un sistema que continua básicamente igual.
Elena Ferro en kireei
Sin embargo, hay escuelas que no se han quedado en el libro de las recetas: se han metido en la cocina, se han arremangado y han empezado a ejecutar los cambios con rigor y valentía. Sin artificios, sin ornamentos, sin “un poquito para probar pero cuidado no nos hagamos daño”. No; muy al contrario, con las manos en la harina hasta el codo.
Una de estas escuelas es el Institut-Escola Les Vinyes de Castellbisbal. Me gusta destacar esta escuela porque tiene también secundaria y es la secundaria el gran desierto en cuanto a innovación educativa. No es que no la haya: hay ejemplos extraordinarios que demuestran que en secundaria también se pueden hacer las cosas de otra manera, pero son gotas en el océano.
El jefe de estudios de Les Vinyes, Boris Mir, escribió un fantástico artículo para Kireei 5 que si no habéis leído todavía vale la pena que leáis: La escuela deseada, la escuela soñada. Hace pocas semanas Boris salió de la cocina para hablar de su escuela en una charla TED en Barcelona. Os recomiendo encarecidamente que veáis el video, son 10 minutos que pueden influir en vuestra manera de ver la innovación educativa o daros esperanza de que el cambio es posible. Podría haceros un resumen de la charla pero prefiero que os lo cuente Boris.
Boris pide ayuda para la innovación educativa, que no solo debe ser tolerada sino respaldada. Estoy totalmente de acuerdo con esto. Así que compartid la charla de Boris, reconozcamos y agradezcamos la labor de estos profesores voluntarios que van más allá de lo que les exige la administración, y empecemos a exigir a nuestros políticos que faciliten y apoyen de verdad la necesaria innovación.