El grupo inicial estuvo formado por varias personas del equipo de Medialab Prado, tres integrantes del colectivo organizador, Bookcamping, algunas personas del gremio de los “bibliotecarios” y otros personas ajenas a él, interesadas en la creación de una biblioteca dentro del centro. Una periodista interesada en la cultura colaborativa y un investigador centrado en la transformación de espacios culturales y la transmisión de conocimiento y actividades creativas.
Rebeca Hernández en Biblogtecarios
Las cuestiones previas que se planteaban eran:
- ¿Cuáles son las necesidades y desafíos de una “biblioteca” Medialab-Prado?
- ¿Qué experiencias de biblioteca digital/analógica nos sirven y/o inspiran?
- ¿Qué necesitamos para hacer circular los saberes de un laboratorio ciudadano, creando una biblioteca como espacio de aprendizaje y vivo?
Durante una amena charla se intentó dar respuestas a éstas y otras cuestiones surgidas en el proceso.
El objetivo:
Medialab-Prado quiere conseguir una “biblioteca” que aglutine la documentación sobre toda la actividad del centro, que funcione como relato o memoria de lo que ocurre diariamente en él. Siempre, teniendo en cuenta los valores de función social que tiene el mismo y destacando la transmisión de conocimiento a sus usuarios.
La documentación:
La documentación que conservan conforma la memoria de las diferentes actividades desarrolladas en Medialab-Prado, que presenta los siguientes problemas a tener en cuenta a la hora de ordenar y recuperar la información:
- La documentación pertenece a varias tipologías y puede encontrarse en diferentes soportes: audiovisual, fotográfica, etc.
- Faltan de criterios estables a la hora de ordenar la información.
- Solventar algunas barreras que suponen el uso de lenguaje específico: tecnológico, etc.
A lo largo de la sesión surgen algunas dudas sobre cómo llevar a cabo el proceso de tratamiento documental. Se barajan diferentes opciones sobre el etiquetado colaborativo de los vídeos del archivo audiovisual; la convenencia o no crear una serie de categorías; cómo crear puntos de consulta dentro del centro; quienes serán los gestores de la colección; añadir (o no) monografías que apoyen las actividades, etc.
Las conclusiones a las que se llegaron, después de un par de horas de trabajo, fueron:
La biblioteca de Medialab…
- debe ser móvil
- debe estar ubicada en lugar de paso de usuarios (preferiblemente cerca de los mediadores culturales).
- debe convertirse en una herramienta de transferencia de conocimiento para el personal y los usuarios de Medialab.
Quedaron planeadas algunas cuestiones que se tratarán a lo largo de las próximas sesiones:
- buscar un sistema de organización de archivo
- buscar la ubicación
- buscar el nombre que identifique a la biblioteca
Intentaré contrar lo avances en próximos posts.
Para finalizar dejo algunos enlaces que sirvan para ampliar información:
¿Qué es Medialab Prado? Ubicado en un edificio industrial rehabilitado, que el pasado ocupo la denominada Serrería Belga y que ahora ocupa este centro orientado como laboratorio creativo de producción, investigación y difusión de proyectos culturales con una fuerte y permanente implicación de y con los ciudadanos dentro de un proceso constante de experimentación y aprendizaje colaborativo.
La actividad de Medialab Prado está adscrita al Área de Gobierno de las Artes, Deporte y Turismo del Ayuntamiento de Madrid.
Más información para saber qué es y qué hace Medialab-Prado