¿A qué persona técnica de cultura no le preocupa cómo conseguir llenar un teatro? Y más aún, ¿cómo hacerlo si no se dispone de recursos económicos para pagar un caché a una compañía?
La voluntad, la taquilla inversa, bonos, zanahorias...
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En la situación actual de crisis económica y donde además la cultura está gravada con un 21% de IVA, tanto las compañías como el personal técnico programador tenemos que desarrollar fórmulas imaginativas y que satisfagan tanto a públicos como a los propios creadores culturales. En este sentido, desde hace un tiempo están surgiendo distintos modelos y propuestas de pasar por taquilla que paso a contaros:
PAGAR LA VOLUNTAD. ¿Cuántas veces no nos hemos parado ante un espectáculo callejero y hemos echado unas monedas? Es una fórmula para atraer a todo tipo de bolsillos: habrá quien pueda pagar más y quien no. Igual alguien no puede pagar nada, pero en este caso nos quedará la satisfacción de haber podido mostrar una creación artística a un número mayor de gente.
TAQUILLA INVERSA. Esta propuesta está basada en la anterior pero la mejora en el sentido de que se explica al público el proceso de gestación de un espectáculo y los gastos que conlleva. Así, se entra sin pagar y se entregan tres tipos de entradas (por ejemplo a 3, 5 y 10 €) y a la salida cada cual toma una decisión responsable y elige cuánto pagar.
BONOS. Este sistema lleva tiempo poniéndose en práctica: si compras entradas para más de un espectáculo el precio se rebaja.
FÓRMULA DE LA ZANAHORIA. Sí, habéis leído bien. Es una de las propuestas más imaginativas que he visto hasta el momento: una sala o festival se da de alta en el Impuesto de Actividades Económicas como tienda de verduras, eludiendo así el 21 % de IVA. Y al comprar una zanahoria, por ejemplo, te regalan una entrada para ir al teatro! Increíble, no?
La pregunta que me surge es ¿están nuestros públicos mentalizados de los costes reales de una producción artística? Tenemos tarea por delante. Personalmente, la fórmula de la “taquilla inversa” me parece de las iniciativas más interesantes que podemos poner en marcha.
Os pongo algunos ejemplos de las distintas propuestas.
El sistema “pagar la voluntad” lo podemos encontrar en el Festival Cultural de Arte a la Gorra en Villar de Rena (Badajoz) el próximo mes de agosto (ver eventos recomendados agosto 2013).
La “taquilla inversa” ya funciona en espacios escénicos como la Sala Beckett de Barcelona . Sorprendentemente, han conseguido mantener el precio medio de la entrada y aumentar la asistencia.
La fórmula de la zanahoria la puedes encontrar en el Festival Comic de Figueras.
Seguro que después de ver estas Cuatro Fórmulas Distintas de Pasar por Taquilla nos animamos a salir de la rutinaria taquilla a precio fijo y hacemos propuestas más imaginativas a nuestros públicos. Merece la pena intentarlo. Yo estoy en ello. ¿Y tú?
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