Como paso previo al diseño del proyecto de intervención, es muy importante disponer de una serie de datos que nos van a proporcionar la información pertinente de la realidad sobre la que queremos intervenir.
ApuntateUna nos muestra 4 herramientas para obtener datos primarios.
Dichos datos los podemos catalogar en:
- datos primarios (son los que obtenemos directamente)
- datos secundarios (los que obtenemos de estudios ya realizados).
Los datos secundarios a su vez se dividen en cuantitativos (los que podemos obtener de padrones, censos, registros, estadísticas…) y cualitativos (documentos o estudios realizados anteriormente sobre el mismo tema que nos interesa).
En este artículo, vamos a ver 4 herramientas para obtener datos primarios para diseñar un proyecto de dinamización sociocultural.
1. Observación participante.
Realmente podemos definir la observación participante como una actitud necesaria para conocer y comprender la realidad que nos rodea. (Ver “Seguimiento de actividades: los diarios de campo“). En este sentido, es bastante conveniente ir tomando notas al hilo de los hechos (si participamos en alguna actividad anterior a nuestro proyecto, en las reuniones/entrevistas previas…).
2. Entrevista participativa.
Consiste en elaborar una serie de preguntas abiertas para conocer a fondo opiniones que nos manifiesten necesidades y/o problemas del entorno sobre el que queremos intervenir. Al mismo tiempo puede resultar importante anotar las diversas reacciones ante las mismas.
3. Informantes clave.
Es evidente que todo el mundo no nos va a ofrecer el mismo nivel de conocimiento sobre una situación dada por lo que una labor imprescindible es seleccionar aquellas personas que conozcan a fondo el asunto que motiva nuestra intervención. Normalmente, las personas informantes clave serán personas muy activas en la comunidad, con una gran red de amistades y contactos, lo que nos puede ser bastante útil para abrirnos nuevas puertas.
4. Cuestionario.
A diferencia de la entrevista participativa, los cuestionarios consisten en una serie de preguntas cerradas que haremos a un número significativo de personas ofreciendo varias respuestas entre las que tendrán que elegir, obteniendo así datos cuantificables. Por ejemplo, se puede utilizar una escala del tipo: (1) muy deficientes, (2) insuficientes, (3) suficientes pero mejorables, (4) muy adecuados, a preguntas como: las instalaciones para actividades socioculturales nos parecen… o los medios usados hasta ahora para difundir actividades son…
Todos estos datos obtenidos debemos saber interpretarlos con posterioridad teniendo en cuenta cuestiones tan significativas como edad, género, estereotipos y prejuicios, emociones, creencias, estatus económico y social, relaciones y grupos sociales, grado de implicación en anteriores actividades de dinamización sociocultural (y cómo han vivido dicha experiencia, si ha habido expectativas no cubiertas y por tanto frustraciones que pueden afectar a la hora de sumarse con entusiasmo a un nuevo proyecto, o por el contrario son personas con valoraciones muy positivas de experiencias anteriores y por tanto será fácil que se entreguen plenamente con un nuevo proyecto), así como aquello que no se dice, la información que se oculta pero que podemos decir que está latente, etc.
Deseo que este contenido te haya sido útil así como interesante. Para la elaboración del mismo he tomado como referencia el cuaderno “Participación ciudadana desde la perspectiva de género en el desarrollo de los territorios” editado por Diputación de Granada en el año 2007. Te recuerdo que también puedes consultar el artículo “La incorporación de la perspectiva de género en los proyectos sociales“.