El próximo 25
de septiembre rodearemos el Congreso de los Diputados para rescatarlo
de un secuestro que ha convertido a esta institución en un órgano
superfluo. Un secuestro de la soberanía popular llevado a cabo
por la Troika y los mercados financieros y ejecutado con el
consentimiento y la colaboración de la mayoría de los partidos políticos.
[Este manifiesto es fruto del debate en
las asambleas de esta Coordinadora, un esfuerzo de síntesis de los
motivos para el 25S que compartimos y otra de las voces por las que
puedes sentirte apelado/a para acudir]
El próximo 25
de septiembre rodearemos el Congreso de los Diputados para rescatarlo
de un secuestro que ha convertido a esta institución en un órgano
superfluo. Un secuestro de la soberanía popular llevado a cabo
por la Troika y los mercados financieros y ejecutado con el
consentimiento y la colaboración de la mayoría de los partidos políticos. Partidos
que han traicionado sus programas electorales, a sus votantes y a la
ciudadanía en general incumpliendo
promesas y contribuyendo al empobrecimiento progresivo de la población.
Rodeamos
el Congreso después de más de un año de intensas movilizaciones en
todos los sectores sociales y tras comprobar que no puede haber
democracia cuando las instituciones que dicen representarla se mueven
por intereses que no son los de la mayoría. Porque no tenemos
nada que hablar con un poder que ha demostrado sistemáticamente ser
ciego, sordo y mudo a justas y concretas demandas de igualdad y justicia
social. Lo rodeamos para rescatar a la política de un régimen económico insostenible y depredador: el sistema capitalista.
Rodeamos
el Congreso porque queremos dar un salto en la movilización social y
poner en el centro la recuperación de la soberanía y del poder
ciudadano, es decir, de la democracia. Hemos creado numerosos procesos
de lucha, espacios de participación y discusión en las redes y en las
plazas, en los barrios y en los centros de trabajo, y hemos llevado a
cabo iniciativas que queremos seguir desarrollando desde abajo, sin
atajos y paso a paso. Porque creemos que el tiempo de las decisiones
tomadas por unos pocos ha terminado; porque, frente a quienes
quieren dejarnos sin futuro, tenemos los medios y la inteligencia
colectiva para decidir y construir la sociedad que queremos; porque
no necesitamos falsos intermediarios, sino recursos y herramientas
colectivas que fomenten activamente la participación política de
todas las personas en los asuntos comunes.
Rodeamos el Congreso el 25S para decirles a quienes dicen mandarnos que no, que desobedeceremos sus imposiciones injustas, como la de pagar su deuda, y que defenderemos los derechos colectivos:
la vivienda, la educación, la salud, el empleo, la participación
democrática, la renta. Para iniciar un proceso que permita que los
responsables de la crisis dejen de ser impunes, para que los pirómanos
que han provocado nuestra crisis no sean recompensados y empiecen, en
cambio, a ser juzgados.
El 25 de
septiembre nos manifestaremos alrededor del Congreso porque queremos
recuperar la responsabilidad sobre nuestro propio futuro sin aceptar
imposiciones. Para decirle a quienes tienen secuestrada la
democracia que ha llegado el momento de irse y para exigir la dimisión
de este Gobierno como primer paso, porque vamos a liberarla
iniciando un proceso constituyente. Un proceso de
participación directa abierto en el que determinemos y pongamos en
marcha las instituciones políticas, herramientas de
participación y mecanismos jurídicos y políticos que
necesitamos para garantizar que las decisiones colectivas
sean completamente efectivas. Un proceso constituyente sostenido y cuya
definición colectiva comienza, pero no termina, el 25S.
Rescatar el Congreso es lanzar una invitación a que se articulen y unan otros movimientos
sociales como la lucha de los funcionarios por la defensa de los
servicios públicos, las diversas “mareas” y otras luchas por la igualdad
y la justicia social. Significa negarnos a aceptar el miedo, la
impotencia y la desorientación surgidas de la reducción de lo político a
lo económico y sus consecuencias fascistas, xenófobas, racistas y
machistas. Y buscar una salida colectiva.
Invitamos a
todas las personas que quieran acompañarnos a rodear el Congreso el 25
de septiembre, a decir ¡basta! y a continuar este camino para rescatar
la democracia y la soberanía.
Queremos derechos, democracia, justicia y libertad para todo el mundo.
Hasta aquí hemos llegado, no tenemos miedo.
Nos vemos el 25S… y más allá.
Hasta aquí hemos llegado, no tenemos miedo.
Nos vemos el 25S… y más allá.