Más de un centenar de focos
activos del movimiento 15-M en los barrios de Madrid retomaron el trabajo que
comenzaron el fin de semana anterior. En la Asamblea de Carabanchel se
paró una redada ilegal y desde Lavapiés se convoca a una
marcha-concentración para este miércoles 8.
La acampada de Barcelona se expande por barrios y ciudades catalanas (más de 100). El 11 cacerolada en la toma de posesión de los ayuntamientos, el 14 acampada en el Parlament, donde a día siguiente hay convocada una cadena humana. Por supuesto el 19, tomamos la calle.
Los barrios y pueblos de Madrid pasan a la acción
Durante todo el fin de semana se ha celebrado la segunda
convocatoria de asambleas de barrios y pueblos. La afluencia de gente
se ha mantenido y el trabajo colectivo se asienta a través de comisiones
y grupos de trabajo en la mayoría de barrios y pueblos. También se ha secundado la marcha del 19 allí donde se ha planteado.
La primera propuesta firme de movilización salida de los barrios surge de la asamblea de Lavapiés.
Convoca a una concentración en las cercanías del Congreso de los
Diputados (en la plaza de Canalejas, Metro Sevilla) el próximo miércoles 8 de junio a las 19h de la tarde,
y llama a las asambleas de los distintos barrios y pueblos de Madrid a
realizar convocatorias en sus plazas para acudir juntas a la
convocatoria.
Se trata de mostrar el rechazo a las reformas que
pretenden aprobar gobierno y patronal en los próximos días en relación a
la negociación colectiva, entre otras cosas. A las 18.30h se ha
convocado a una marcha que saldrá desde la plaza de Lavapiés pasando por
la Puerta del Sol para acabar en la concentración.
Por otro lado, al término de la asamblea de Carabanchel, se paró una redada ilegal.
Cuando acababa de terminar y quedaban aún unas cien personas en la
plaza se estaba produciendo una redada en el metro. La asamblea se
dirigió a la boca de metro al grito de: “¡ningún ser humano, es
ilegal!”. En el interior del metro, dos policías nacionales, estaban
identificando a tres personas. En cuanto los policías vieron lo que se
les venía encima, devolvieron la documentación y abandonaron.
Las acciones para bloquear los desahucios
han sido uno de los puntos coincidentes de muchas plazas de barrios.
Desde Tetuán, en colaboración con la Plataforma de Afectados por las
Hipotecas (PAH) y Democracia real Ya van a intentar parar el primero el próximo día 15. En muchas otras asambleas se han planteado propuestas similares y se están realizando mapeos de las zonas para coordinarlos.
En las asambleas se van generando más propuestas interesantes. La Asamblea del 2 de Mayo prepara un banco de tiempo, una escuela popular y foros de debate en Malasaña. En Arganzuela
se está preparando un banco de libros de texto, para que los padres y
madres puedan donar al finalizar el curso los libros del año y recibir
los del siguiente en septiembre.
Acampadabcn llega al Parlament catalán el próximo 14 de junio
La Acampada de Barcelona en Plaça Catalunya se está extendiendo por los barrios de la ciudad y también por las localidades catalanas, casi cien en total (Sabadell, Badia del Vallès, Terrassa, Ripollet, Cerdanyola, ...) . Este sábado se han reunido durante el mediodía representantes de las asambleas locales que han decidido convocar el próximo 14 de junio una cacerolada y una acampada en el Parc de la Ciutadella donde está el Parlament catalán.
Anteriormente ya se había convocado la formación de una
cadena humana en el mismo Parlament para el 15 de junio, día en el que
el Govern catalán aprueba los recortes en sanidad y educación que contiene la ley de presupuestos.
El objetivo es impedir, o al menos dificultar, la aprobación de estos
recortes sociales. Antes, el 11 de junio, día de constitución de los
ayuntamientos y elección de los alcaldes, también se prevé realizar
protestas ante los ayuntamientos.
Entre otras propuestas de movilización se está trabajando en la convocatoria de una huelga general con la idea de extender el movimiento
no solo en los barrios, sino también en las empresas y entre los
trabajadores. El día 19 de junio Barcelona secunda el día de
movilización internacional. De hecho, la solidaridad y el apoyo de
protestas en Portugal, Grecia o Francia o el rechazo del desalojo del
pasado 27-M de la plaza han sido también tratados en la asamblea.
Finalmente, la Asamblea de AcampadaBCN ha decidido
permanecer en Plaça Catalunya para “continuar trabajando en un espacio
público de debate que permita recoger colectivamente las demandas y
propuestas” y garantizar la extensión de la movilización.
El debate de mínimos en Barcelona
Los mínimos, aún en debate, pero parcialmente aprobados
por la asamblea, incluyen la discusión sobre si éstas tienen que incluir
el máximo de reivindicaciones posibles o recoger unos mínimos que sumen
el máximo de apoyos sociales. Con todo, ya se han consensuado unos puntos mínimos
aprobados por la asamblea de Barcelona que hablan de acabar con los
privilegios de políticos y banqueros, así como de la prohibición de
cualquier tipo de rescate a las entidades financieras y la devolución de
los que ya se han hecho para crear una banca pública que esté bajo
control social. También se pide la regulación de los movimientos de las
transacciones financieras internacionales. Al mismo tiempo, se quiere
acabar con los privilegios de las grandes fortunas, el incremento del
tipo impositivo de las SICAV, la recuperación de los impuestos de
sucesiones y de patrimonio. Otro elemento a tener en cuenta de los
mínimos barceloneses es el control efectivo del fraude fiscal y de las
fugas de capitales a los paraísos fiscales.
Uno de los puntos esenciales de la acampada es no sólo
el rechazo a los recortes de la Generalitat, sino también la demanda
para que se refuerce el Estado del bienestar y se priorice en educación,
la atención a la dependencia y la sanidad, de tal manera que se
garantice la igualdad de oportunidades en acceso a estos servicios
básicos, así como que se garantice su calidad. Se propone que se
defienda el derecho a la vivienda a partir de la expropiación de los
pisos y casas en desuso para que sean sometidos al alquiler social,
la asunción de la dación del piso como elemento suficiente para
cancelar una hipoteca, así como la prohibición de la especulación
inmobiliaria. También se reclama una economía al servicio de las
personas que retire la reforma de las personas, que garantice trabajo
digno y de calidad con un mayor salario mínimo y el establecimiento de
un salario máximo, así como la reducción de la jornada laboral.
En el apartado de libertades y democracia participativa
se pide la garantía del derecho a la información, la derogación de la
Ley Sinde, la celebración de referéndums vinculantes en temas
importantes para la organización social, política y económica y la
implementación de los presupuestos participativos, así como la reforma
de la Ley electoral, entre otras medidas. Respecto al medio ambiente se
pide dejar de basar la economía en el crecimiento indefinido así como
potenciar la soberanía alimentaria, la agricultura agroecológica y el
consumo responsable y el comercio justo, además de ir más allá del
protocolo de Kyoto en la lucha contra el cambio climático. El derecho a
la autodeterminación de los pueblos, referido en este caso al catalán,
está a punto de ser incluido en la demanda de mínimos según los últimos
debates.
Valencia: cansados pero contentos y con ganas
Un pelotón de hombres del Cuerpo Nacional de Policía
vigila distendido la plaza del Ayuntamiento oculto tras las tristes
acacias del aparcamiento del edificio de Correos. En el centro de la
plaza se trabaja, se discute o simplemente se está,
sin más aditivos. Hay juegos y diversión, además de debate. Son las
doce del mediodía y bajo un sol de justicia, un grupo de personas de
ambos sexos se sienta a lo moruno bajo una tienda de plástico; los
zapatos de la peña se amontonan a las puertas, lo que da un aire de
mezquita a la escena.
Pero nada que ver, se está discutiendo la pertinencia de
las inminentes manifestaciones de protesta y alarma. El resultado es
satisfactorio, pues a lo largo de esta primera semana de junio más de
trescientas personas se concentraron en el CIE (Centro de Internamiento
de Extranjeros) de la calle Zapadores para manifestar su repulsa por lo
que ya viene siendo un escándalo ciudadano desde hace meses. Hasta los
sindicatos policiales valencianos han criticado las condiciones de este antiguo cuartel del Ejército sin rehabilitar. Los manifestantes exigen su cierre inmediato.
En València, cada comisión de debate funciona a su aire y la coordinación entre ellas no es muy fluida. Domina la espontaneidad pero eso, para muchos, forma parte del espíritu del contramovimiento disidente.
Las actividades son numerosas: logística, educación,
medio ambiente. Los talleres también: taller de huerto; taller de
ceniceros; taller de no violencia, taller Fórmula 1 y crea tu propio
coche de cartón; grafismo, etc. También hay una comisión del Amor y otra
de Circo.
Los muchachos llevan su nombre pintado sobre una tela en
el pecho. El criterio dominante es seguir allí por el momento, aunque
va comiendo terreno la idea de descentralizar la protesta
y llevarla a las asambleas de barrio que ya se están produciendo por
toda la ciudad. Malilla, Benimaclet, Orriols, Russafa, los barrios
populares de la ciudad del Turia escuchan lo que los indignados tienen
que decir.
Uno de los acampados dice a Diagonal: “La resistencia permanece pero la
acampada se extingue”.
Uno de los concentrados, Miquel de 23 años, dice: “Esto
es un campo de trabajo, no una comuna hippy. Muchos vienen aquí a
liberar sus egos y ese no es el plan; otros vienen a hacer el hippy, y
tampoco”. La policía local, asombrosamente, se ofrece a escoltarlos
algunas veces cuando se disponen a salir en manifestación o de traslado a
los barrios.
Media ciudad se ha paseado por la plaza que más nombres
ha tenido de España, para ver que se cuece. En conclusión, no hay
conclusiones ni menos certezas, la revolución del siglo XXI está aquí,
sobre el asfalto y junto a los puestos de flores; en realidad no ha
hecho más que empezar.
Sevilla: de la plaza del Derroche a la plaza del Pueblo
Hasta hace poco, el complejo Metrosol Parasol. levantado
en la Plaza de la Encarnación, en el corazón de Sevilla, representaba
un símbolo de derroche de la administración pública en contraste con las
carencias que marcan la vida en los barrios y pueblos de la provincia.
Justo en esta Plaza fue donde se instaló la acampada en la ciudad. Desde
ese momento, se ha convertido en la “Plaza del Pueblo” o la “Plaza 15
de Mayo”. No sólo se ha recuperado una dignidad necesaria, sino que
después de tres semanas, este espacio, convertido en ágora vivo, está
siendo testigo diario de un proceso inédito de construcción colectiva, de un camino complejo, pero en el que confluyen multitud de sensibilidades.
La tasa de paro en Sevilla supera el 26% (más del 28% en
el caso de las mujeres) y ésta es la provincia andaluza más cara para
comprar y alquilar un piso. Son sólo algunas cifras que reflejan que los problemas que llevaron a la calle a miles de manifestantes siguen siendo los mismos.
Sin embargo, las respuestas han cambiado, pasando de la impotencia
individual a la acción colectiva, cuya chispa, además, está cada vez más
encendida, como pudo verse en la última manifestación celebrada el 29
de mayo, que duplicó en asistencia a la anterior, con más de 23.000 personas,
una impredecible respuesta ciudadana un domingo a 30 grados en una
Sevilla de puente y que reanimó la esperanza en este movimiento.
Diariamente, miles de personas transitan por la Plaza, se organizan en
comisiones, proponen actividades o, en muchos casos, por primera vez,
comparten su indignación y sus soluciones en las concentraciones y
asambleas.
El futuro está por construir, pero mientras tanto, el
presente está lleno de experiencias enriquecedoras, desde el
funcionamiento asambleario, a la autogestión cotidiana de la acampada en
la Plaza, pasando por el intenso trabajo de difusión que se está realizando en los barrios y pueblos. Ahora mismo están funcionando asambleas en todos los barrios en Sevilla,
que en la última convocatoria reunió, en total, a más de 1.000 vecinos y
vecinas, además de la acción que ya se desarrolla en 12 pueblos de la
provincia. Además de la comisión de barrios y de pueblos, en Sevilla
funcionan multitud de comisiones, cada vez más organizadas, como son la
comisión de feminismos, diversidad cultural y personas migrantes,
educación, trabajo y precariedad laboral, etc., así como otras más
enfocadas a la organización de la acampada, tales como coordinación o
logística.
Por otro lado, durante la asamblea del 5 de junio se decidió mantener la acampada hasta el día 19.
Asturias: La gente se acostumbra a tomar las plazas
En Asturies aún no hay fecha para levantar el campamento
de la Escandalera, en Uviéu, pero fuentes del grupo coordinador
consideran que debería hacerse antes del 15 de junio. La fecha, no
obstante, es motivo de discusión, y será necesario que toda la asamblea se pronuncie.
En todo caso, el grupo activista que ha cuajado en Uviéu
en torno a la iniciativa de Democracia Real Ya apuesta por mantener las
asambleas abiertas de la Escandalera, céntrica plaza convertida en
centro de operaciones del movimiento. Otra opción que está cobrando
fuerza es la posibilidad de que el movimiento logre la cesión de un
espacio público para transformarlo en Centro Social Autogestionado, y
continuar allí con la actividad cultural y política. A las comisiones
que vienen funcionando se ha añadido una específica para discutir el
mañana del movimiento.
También Xixón se ha acostumbrado a pasar por la Plaza
del Pueblo -antes Plaza Mayor- para ver, apoyar o integrarse en la
acampada. Decenas de personas se están incorporando a las comisiones
que desarrollan el movimiento y mantienen una infraestructura
permanente con comida, biblioteca, prensa, información, etc. Se han
creado grupos de debate sobre asuntos como la Ley Electoral o los
sistemas de democracia participativa.
Actualmente, los esfuerzos están dirigidos a ampliar las
asambleas a los barrios, y dar así solución de continuidad al
movimiento. Las convocatorias han tenido un seguimiento notable, con más
de 3.000 personas en algunas jornadas. Se ha llevado a cabo una reunión
con representantes del ayuntamiento para pedir las cuentas municipales y
reivindicar mecanismos de participación descentralizada, con énfasis en
los barrios. De momento, la asamblea de Xixón no prevé abandonar la
plaza. La posibilidad de un desalojo hace contemplar el traslado del
equipo de comunicación y del material informático a otro espacio. Varias asociaciones sociales y de vecinos se han ofrecido a dar cobertura en sus locales para favorecer la continuidad del movimiento.
En Avilés, la acampada en la plaza del Ayuntamiento ha
congregado cada tarde a cientos de personas. Según informa la comisión
de comunicación de la acampada, cinco comisiones regulan la vida en el
campamento y dotan de contenido las reivindicaciones. Diariamente se
celebran tres asambleas, dos organizativas y una general, donde se
abordan las propuestas para avanzar en una democracia participativa.
Otro de los debates se ha centrado en los recortes sociales derivados de la gestión que los gobiernos han hecho de la crisis económica.
Una necesidad del movimiento fue establecer cauces de coordinación con
el resto de acampadas de Asturies para acordar acciones conjuntas y un
consenso de mínimos. Ese contacto ha permitido celebrar en Avilés una
manifestación el domingo 5 de junio con final en el Centro Cultural
Oscar Niemeyer, en la que participaron miles de personas. Aunque aún no
se ha definido cuando se levantará la acampada, ya se debaten propuestas
para la articulación del movimiento y su continuidad.
Más de 300 tiendas en Zaragoza
La acampada de Zaragoza comienza a mediodía el martes
17, unas cuantas horas después del desalojo de la acampada de Sol. Somos
apenas medio centenar de personas que acabamos de conocernos y hay dos
necesidades urgentes: organización y autodefensa.
Así, se forman los primeros grupos de trabajo y
asambleas, se empieza a construir el campamento y se organiza un taller
de resistencia pacífica. A marchas forzadas, aprendemos a organizarnos
asambleariamente, a protegernos de forma noviolenta de las posibles
actuaciones policiales, a comunicarnos con el exterior y a organizar la
comida y materiales que la gente de la ciudad nos cede solidariamente.
Dos semanas después, la situación es muy diferente. Más de 300 tiendas y varias carpas componen el campamento,
y el número de comisiones no ha hecho más que crecer. Asambleas
multitudinarias deciden el futuro del campamento, y los foros abiertos
se han convertido en un referente de participación ciudadana. El
movimiento empieza a extenderse a fábricas, barrios y la universidad.
Hay reivindicaciones globales, democracia real, directa,
participativa, contra la dictadura de los poderes económicos; pero
también concretas para la ciudad. Así, apoyamos la movilización de los conductores de autobuses urbanos que pedían la municipalización del servicio
nos movilizamos contra la institucionalización de la cultura,
representada por la candidatura de Zaragoza a Capital Europea de la
Cultura 2016, al grito de “la cultura está en las calles”.
No hemos decidido todavía cuál será el futuro del
campamento, pero tenemos claro que el movimiento sigue, y que ahora
mismo lo importante es canalizar toda la fuerza que se ha reunido en la
plaza para dar juntos el próximo paso colectivo. Para que, aunque
finalice la acampada, la primavera del 15-M siga viva.
Salamanca: 4.000 personas en apoyo a la acampada de Barcelona
En Salamanca, como en otras ciudades, también ha habido
un número considerable de jóvenes que han acampado. En esta ciudad la
acampada se está llevando a cabo en la Plaza de la Constitución, junto a
la Subdelegación del Gobierno. La protesta ha recibido muchos apoyos de
diferentes movimientos sociales de la ciudad.
Habitualmente están acampados entre 40 y 50 jóvenes
llegando a ser 200 en los fines de semana. Cabe destacar el compromiso
de los acampados con la causa ya que han luchado contra las inclemencias
meteorológicas al igual que hay que decir que el comportamiento de los
acampados siempre se mantiene dentro de los límites legales, sin
vulnerar estos límites en ningún momento.
También es destacable el apoyo popular que están recibiendo los
acampados, apoyo que se pudo constatar con la afluencia masiva de gente,
cerca de 4.000 personas, a la manifestación en solidaridad con los
jóvenes barceloneses brutalmente desalojados. La convivencia de los
acampados con los vecinos de casas aledañas se está llevando de forma
pacífica.
Ni la policía local, escasamente presente, ni la policía
nacional, presente de manera continua por estar la acampada junto a la
Subdelegación del Gobierno, han tenido que intervenir en ningún momento
para solventar problemas de convivencia entre acampados y vecinos. Como
en otras ciudades la organización y trabajo diario forma parte de las actividades de los acampados.
Las asambleas se encargan de diferentes temáticas que preocupan al
conjunto de ciudadanos españoles en general y a los salmantinos en
particular.
Cantabria: Objetivos comunes desde la base
En poco más de 15 días, la horizontalidad y el
asamblearismo se han asentado en el Movimiento 15M de Santander. En una
ciudad en la que existía una brecha casi insalvable entre movimientos sociales y ciudadanía,
se ha producido una curiosa convivencia entre personas politizadas y
otras que nunca habían cuestionado el sistema. Todo aquel y aquella que
ha acudido a la Plaza Porticada ha acogido con gusto un método que
permite expresarse, perseguir objetivos comunes, consensuar.
Las comisiones (Información, Dinamización, Internet,
Coordinación territorial, Infraestructura,… entre otras) funcionan
autónomamente, y tras algunos días primerizos en los que se cuestionaba
la estructura organizativa, a estas alturas se trabaja sobre la base de la confianza que se refrenda semanalmente en un Consejo de Portavoces de comisiones.
El espacio liberado que es hoy la Plaza Porticada, aloja cada noche una treintena de personas, abrigadas por una infraestructura que incluye cocina y espacios separados para cada una de las comisiones que han ido poblando la Plaza ‘liberada’. El tránsito diario de personas es variable.
Todas las tardes a las 20.00 se celebra la asamblea de
gestión –la Asambleuca- y, paralelamente, se discuten en foros de debate
las propuestas de objetivos, pues la Gran Asamblea –máximo órgano de
decisión que se convoca en la tarde de los domingos- decidió que se
generarían objetivos desde las bases y no partiendo de documentos
producidos en otros territorios. Los viernes y domingos hay además una sesión de micrófono abierto en la que la gente, cada vez con más madurez, se expresa libremente. La duración de la acampada es todavía una incógnita.
Además de en Santander, en Cantabria ya han surgido
acampadas en Torrelavega, Reinosa, Cabezón de la Sal y San Vicente de la
Barquera.
Vigo: una asamblea entre los grandes bancos
“Es una carrera de fondo”; “Hay que cambiar el sistema
electoral,... qué coño, el sistema!”; “Es aquí, en la asamblea de calle,
la primera vez que me siento en democracia”. Estas son solo algunas de
las voces presentes ayer en un acto que congregó aproximadamente a 300
personas en una asamblea popular en la que se entonó un enorme “¡¡por
fin!!” colectivo que se entrelaza con el sentir de indignación general
de los y de las presentes.
Esta asamblea popular se acordó el martes 17 de mayo,
cuando decenas de personas se juntaron de modo espontáneo delante del
MARCO (Museo de Arte Contemporáneo de Vigo) para hablar del éxito de la
manifestación del 15 de Mayo así como para informarse sobre como estaba
la situación en otras partes del estado, y ver que pasos poder dar en
adelante.
Tras dicha reunión se acordó organizar una concentración
permanente en la confluencia entre las calles Colón y Príncipe que, al
mismo tiempo, serviría como lugar de celebración de la asamblea popular
que se celebrará todos los días en Vigo a partir de las 19:30, justo al
lado de las sedes centrales de los grandes bancos en la ciudad olívica.
En el acto de ayer, en el que predominó el ambiente
participativo, plural y colaborativo, se tomaron decisiones
organizativas, se apuntaron diferentes iniciativas y se escucharon todo
tipo de propuestas y sentimientos. Además se informó a los asistentes de
la concesión del permiso para permanecer en el lugar de concentración
hasta el próximo día 23 de Mayo.
La positiva respuesta de los asistentes ha hecho que se
organizasen turnos para permanecer en el campamento permanente, así como
gente que acerca provisiones, megafonía o cualquier tipo de material
que permita una normalización y refuerzo de un movimiento que está
brotando en España y que está despertando a toda la población en
general, y a la juventud en particular.