El catedrático de economía aplicada de la Universidad Autónoma de
Barcelona demostró en su intervención que el rigor crítico no está
reñido con el buen humor. Antes de hablar de sus seis propuestas financieras contra la crisis, Oliveres desgranó una serie de
detalles desconocidos para la mayoría, de las acciones neoliberales que
habían provocado la crisis, y de la actuación de grandes negocios financieros y empresas multinacionales para beneficiarse de la catástrofe provocada por ellos.
Beneficiarse, por ejemplo, de la utilización de los Expedientes de Regulación de Empleo, los ya populares EREs. Justificados en algunos casos, pero sin motivo en otros muchos, como en la SEAT de Cataluña. Este fabricante de coches tuvo pérdidas en 2008. Pero el análisis realizado por Oliveres de los balances de SEAT durante los diez años anteriores al de
pérdidas, reflejaban que la empresa había obtenido de cada trabajador un
media de un millón doscientos mil euros, una vez descontado los
salarios. Pero SEAT obtuvo en 2009 autorización para realizar un ERE que
expulsó a cinco mil trabajadores. ¿El método para conseguir la
autorización? El chantaje: o nos lo permiten, o nos vamos.
Contra este y otros chantajes de la economía de la avaricia, Oliveres propone las siguientes seis medidas.
1. Erradicar el fraude fiscal. En paralelo, aumentar de los impuestos a los que más tienen.
2. Aplicar la Tasa Tobin a los movimientos de capital.
3. Nacionalización de la banca que ha recibido dinero público. El
Gobierno español no se ha quedado con una sola acción de los bancos a
los que ha dado dinero.
4. Nacionalización de las cajas de ahorros.
5. Promocionar la banca ética.
6. Romper el euro. Economías dispares no deben tener una única moneda.
Finalmente, Oliveres hizo esta recomendación: “cancelen sus planes de pensiones. Con ellos somos cómplices.”
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